Desde el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) nos unimos al optimismo frente al acuerdo parcial alcanzado hoy entre el Gobierno y las FARC-EP para finalizar de manera definitiva las hostilidades. Aplaudimos, asimismo, los esfuerzos y la voluntad política que lo han hecho posible. Confiamos en que esa voluntad se mantenga para lograr el cumplimiento de los compromisos alcanzados.
Creemos que el final de las acciones armadas contribuirá a que se facilite la implementación de los acuerdos en temas humanitarios alcanzados en el marco del proceso de paz. Es urgente obtener resultados concretos en el plano humanitario.
La necesidad de cambios concretos a las condiciones de vida de las víctimas del conflicto armado es paralela al compromiso del CICR de seguir trabajando en Colombia mientras las consecuencias derivadas del conflicto y la violencia armada persistan.
Insistimos en que lo pactado debe tener efectos reales sobre la vida de las comunidades que viven en las zonas afectadas por la guerra.
Mantenemos nuestra disposición para continuar apoyando a Colombia en la implementación de las medidas que se han acordado hasta ahora en favor de las víctimas. Esa misma voluntad estará presente si se requiere nuestra participación en otras iniciativas en favor de las víctimas del conflicto. Desgraciadamente, la violencia armada aún persiste en Colombia y sigue dejando consecuencias devastadoras.
Christoph Harnisch
Jefe de la delegación del CICR en Colombia
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