Señor presidente, Excelencias, señoras y señores:
Los trágicos acontecimientos que tuvieron lugar en Beirut nos han conmocionado a todos.
Esta tragedia –la escala y el alcance de la destrucción, las víctimas, las personas desplazadas y desaparecidas– es aún más devastadora habida cuenta de la fragilidad de Líbano hoy en día. El país y a su población ya afrontaban una crisis económica y financiera, y la pandemia los había llevado al límite.
Señor presidente, recibo con satisfacción esta conferencia. Es vital que aunemos nuestros recursos colectivos para apoyar a Líbano y a su población en esta última tragedia, para que no se convierta en una más.
Mi organización, el Comité Internacional de la Cruz Roja, está presente en Líbano desde hace décadas, a lo largo de recurrentes conflictos. Observamos en forma directa los efectos de largo alcance de la explosión del martes, así como los recuerdos y temores que evoca. Desde las primeras horas, hemos estado activos sobre el terreno, trabajando estrechamente con la Cruz Roja Libanesa y con las autoridades e instituciones locales, a fin de evaluar las necesidades inmediatas y de dar respuesta. Pero se necesita más apoyo.
- Prestamos apoyo a los hospitales para reponer los suministros médicos agotados, pero se necesita más.
- Prestamos apoyo a centros especializados que atienden a los numerosos heridos que perdieron los miembros inferiores en la explosión, pero se necesita más.
- Hemos identificado un trauma psicosocial significativo debido a las explosiones; se necesita más apoyo.
- Prestamos apoyo a las poblaciones particularmente vulnerables mediante alimentos y asistencia monetaria; pero, ante más de 300.000 personas desplazadas, se necesita más apoyo.
- Prestamos apoyo para el manejo y la identificación de los restos humanos en forma adecuada.
- Hemos identificado una severa disrupción de los sistemas de suministro de agua; se necesitará apoyo para su reparación.
Decenas de miles de personas están necesitadas. La velocidad es esencial. La Cruz Roja trabaja denodadamente, y estamos dispuestos a hacer más, en alianza con agentes de buena voluntad. Conforme a nuestra evaluación inicial, proyectamos los gastos de la Cruz Roja en 40 millones de euros adicionales para la respuesta inmediata hasta fin de este año.
Pero, más allá de esta respuesta inmediata, lo que será crucial es su apoyo a largo plazo. Hemos visto, a través de esta crisis, el valor esencial de la inversión en instituciones. Por nuestra parte, estamos orgullosos de nuestras sólidas asociaciones, con la Cruz Roja Libanesa, por supuesto, y también con el Hospital Universitario Rafik Hariri (junto con Agence Française de Développement). Estas son instituciones en la primera línea de esta respuesta, y necesitamos invertir en la resiliencia de instituciones como ellas para el futuro.
Gracias.
Para más información:
Rona Halabi, portavoz del CICR para Líbano, ralhalabi@icrc.org, +961 70 153 928
Ruth Hetherington, portavoz del CICR para Oriente Próximo, Ginebra, rhetherington@icrc.org, +417 94 47 37 26
