Artículo

La Cumbre sobre los refugiados ofrece la oportunidad de reafirmar el DIH y destacar las necesidades de los migrantes vulnerables

La próxima semana, la ciudad de Nueva York será escenario de dos eventos de alto nivel relacionados con los migrantes y los refugiados, cuyo objetivo es reunir a los dirigentes mundiales, los miembros de la sociedad civil y las organizaciones, como el CICR, a fin de que encaren la crisis que se ha transformado en uno de los mayores desafíos humanitarios en una generación.

El 19 de septiembre, el 71° período de sesiones de la Asamblea General de la ONU auspiciará la Reunión de alto nivel sobre la respuesta a los grandes desplazamientos de refugiados y migrantes. Se espera de esta reunión que elabore un enfoque más humano y coordinado a los desafíos vinculados con el desplazamiento.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, auspiciará la Cumbre de dirigentes sobre la crisis mundial de los refugiados, que se celebrará el 20 de septiembre con el objetivo declarado de movilizar nuevos e importantes compromisos mundiales para fortalecer la financiación de los llamamientos humanitarios y de las organizaciones humanitarias internacionales, aumentar el número de refugiados admitidos a través del reasentamiento o de otras vías jurídicas, y aumentar la autonomía y la inclusión de los refugiados ofreciéndoles oportunidades de educación y de empleo legal.

Peter Maurer, presidente del CICR, tiene previsto asistir a ambas reuniones.

Según las Naciones Unidas, al menos 65 millones de personas en el mundo se han visto forzadas a desplazarse, apostando a que la vida en un lugar desconocido será más segura que la certidumbre del conflicto, la violencia o la persecución que han dejado atrás.

Se espera que el señor Maurer inste a los Estados a cumplir con las obligaciones que les impone el derecho internacional humanitario y a abstenerse de adoptar políticas que violan estas normas y causan nuevas consecuencias humanitarias.

Asimismo, hará hincapié en el sufrimiento, la dignidad, la seguridad y los derechos de los refugiados vulnerables, las personas internamente desplazadas y los solicitantes de asilo.

En mayo, el señor Maurer se refirió a los factores que obligan a las personas a huir y explicó por qué los dirigentes mundiales debían empezar a pensar en la migración como una oportunidad.

"En términos generales, la migración es positiva para la sociedad", señaló. "Quisiera volver a esta verdad tan sencilla y recordar a los dirigentes mundiales que, para sostener el crecimiento económico, la vitalidad y la innovación de sus sociedades, necesitan la migración. Necesitan que la gente joven del sur del mundo migre a los centros industriales del mundo más desarrollado".