Las fábricas sufrieron daños o están destruidas. El cierre de numerosas empresas causó la pérdida de empleos y afectó la disponibilidad de bienes y servicios esenciales, incluida la asistencia de salud.
La única empresa que producía oxígeno cesó sus actividades y los pocos hospitales que funcionan –desbordados por derivaciones de centros de atención primaria que ya no están operativos– se ven afectados por la escasez de este elemento, mientras el país sigue afrontando la crisis causada por la pandemia de COVID-19. Asimismo, los centros de salud y las plantas de tratamiento de agua siguen funcionando en gran medida mediante el uso de generadores, debido a la falta de suministro regular de electricidad o de combustible en la región.
"La población está mostrando una increíble capacidad de resiliencia y de solidaridad en esta crisis", dijo Nicolas Von Arx, jefe de la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Adís Abeba. "Sin embargo, sus reservas y ahorros están agotados. El restablecimiento de la actividad comercial normal y de las cadenas de suministro también reviste una importancia vital. La asistencia humanitaria no puede sustituirlos."
Resumen de actividades operacionales
- Tras la reanudación de los enfrentamientos en junio, el CICR entregó insumos médicos y equipos hospitalarios a cinco hospitales de las regiones de Amhara y Tigray: el hospital general de Sekota, el hospital general de Lalibela, el hospital universitario de Gondar, el hospital de atención primaria de Aykel y el hospital universitario de Ayder. Estos insumos alcanzan para el tratamiento de 250 heridos graves o 900 heridos leves, así como de 3000 personas con otras afecciones.
- Asimismo, hay insumos médicos para catorce establecimientos sanitarios, tanto de atención primaria de salud como de hospitales, listos para ser despachados a Mekelle en un convoy para ayudar a atender las necesidades en zonas rurales.
- El CICR también proporcionó asistencia financiera para rehabilitar el pabellón para pacientes de COVID-19 del hospital general de Mekelle, ya que los casos siguen aumentando en la región y el pabellón es el único que presta estos servicios.
- El CICR comenzó a rehabilitar el hospital de Suhul en Shire y el hospital de Shiraro; también donó piezas de repuesto para la planta de tratamiento de agua del hospital de Ayder, así como generadores para los hospitales de Humera, Dansha y Maikadra.
- En colaboración con la Cruz Roja de Etiopía, el CICR siguió suministrando agua por medio de camiones cisterna para apoyo inmediato a las comunidades más vulnerables de Tigray. El CICR también mantuvo su donación de productos químicos a las plantas de tratamiento de agua para que no se interrumpiera la producción de agua segura, teniendo en cuenta que la temporada de lluvias aumenta el riesgo de diversas enfermedades transmitidas por el agua.
- Por otra parte, en diferentes lugares de las regiones de Tigray y Amhara se están rehabilitando materiales electromecánicos –como bombas y generadores– y sustituyendo filtros; estas tareas comprenden la rehabilitación y sustitución de bombas manuales.
- Ante el continuo apagón de telecomunicaciones, el CICR sigue facilitando llamadas telefónicas o mensajes escritos para restablecer el contacto entre familiares y ayudar a que las personas que se encuentran dispersas en Tigray y en otras regiones mantengan el contacto con sus seres queridos. Estos servicios han sido utilizados por estudiantes universitarios, personas en riesgo y miembros de la población en general de diferentes partes del país.
Contacto para los medios de comunicación:
Florian Seriex, CICR, Ginebra, fseriex@icrc.org, tel.: +41 79 574 06 36
