Artículo

Islas Falklands/Malvinas: la diplomacia al servicio de objetivos humanitarios

Ginebra (CICR) – Con el objetivo de presentar buenas prácticas y lecciones aprendidas a partir del Plan de Proyecto Humanitario (PPH), el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) junto con la Misión Permanente de la República Argentina y la Misión Permanente del Reino Unido, organizó este miércoles el evento "La diplomacia al servicio de objetivos humanitarios", en su sede, en Ginebra. El encuentro tiene lugar nueve meses después de la entrega del informe final del PPH, que hasta el momento ha permitido identificar los restos mortales de 104 soldados.

"El principal objetivo de este trabajo fue dar a las familias la posibilidad de llevar su luto con dignidad", sostuvo el director de Actividades Operacionales del CICR, Dominik Stillhart, al presentar el evento. Stillhart destacó, además del aspecto humano, la importancia del derecho internacional humanitario y el proceso diplomático del PPH. "El Reino Unido y la Argentina trabajaron juntos para definir, desarrollar y alcanzar un objetivo humanitario común. Espero que otros Estados se inspiren en este ejemplo", afirmó el director, destacando el papel de intermediario neutral que cumplió el CICR.

El PPH, que se llevó a cabo en cementerio de Darwin, en las islas Falkland/Malvinas, es la primera iniciativa forense con un mandato específico encomendado por dos Estados que se enfrentaron, en el pasado, en un conflicto armado internacional. El mencionado plan, que se desplegó entre 2017 y 2018, fue el resultado de una negociación diplomática que culminó con un acuerdo entre la Argentina y el Reino Unido por el cual se encomendó al CICR la identificación de los soldados fallecidos durante el conflicto armado que fueron sepultados bajo la lápida "soldado argentino solo conocido por Dios".

En el evento, participaron el secretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de Argentina, Claudio Avruj, el representante Permanente del Reino Unido en Ginebra, embajador Julian Braithwaite, el coronel Geoffrey Cardozo y el ex combatiente Julio Aro, la presidenta de la Comisión de Familiares, María Fernando Araujo, el jefe forense del PPH, Morris Tidball-Binz, entre otros. El embajador Carlos Foradori y el representante de Corporación América y piloto de la Armada Argentina que participó en el conflicto, Roberto Curilovic, también estaban presentes.

Deuda

"Hay que reconocer que la Argentina tenía una deuda con sus héroes y familiares", afirmó Avruj, y que era el tiempo de dar respuestas. El secretario consideró que el PPH fue un "hito de la historia contemporánea" y un "ejemplo del valor de lo humanitario".

Para el embajador Braithwaite, el PPH abordó una cuestión humanitaria sensible, y la principal prioridad fue dar respuesta a los deseos de las familias afectadas. "El PPH fue un destacado ejemplo de cómo el CICR y el derecho internacional humanitario pueden dar prioridad, por sobre la política, a las necesidades de la población afectada por un un conflicto", consideró. Además, afirmó que el CICR desempeñó un papel clave para que la Argentina y el Reino Unido pudieran trabajar juntos.

En el panel de expertos, la forense Mercedes Salado explicó que su trabajo no solo conlleva la responsabilidad de transmitir los resultados a las familias de los soldados. Según Salado, para todo el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), este proyecto significó algo muy diferente. "Nunca pensamos que íbamos a encontrarlos enterrados con respeto y dignidad y con la voluntad de preservarlos para el futuro. Me impactó."

Tidball-Binz, por su parte, afirmó: "Cada familia cargó una piedra en el zapato; fueron 36 años caminando con esa piedra. Ahora pueden sacársela". Y entregó piedras traídas del cementerio de Darwin a la presidenta de la Comisión de Familiares, María Fernanda Araujo, para que las lleve al cementerio.

María Fernanda, cuyo hermano fue identificado en el marco del PPH, dio un conmovedor testimonio sobre su historia familiar. Su madre, al recibir los resultados y confirmar que su hijo había sido enterrado dignamente, dijo: "Quiero besar esas manos que arroparon a mi hijo". Y continuó: "No me importa que sea inglés, escocés o esquimal, son manos de un ser humano que arroparon a mi hijo". "Fue parir de nuevo", dijo la madre.

Según María Fernanda, en ese momento entendió todo, al referirse al trabajo del coronel británico Geoffrey Cardozo, quien creó el cementerio en 1983, después del conflicto del año anterior.

Cardozo, también presente, contó detalles de la experiencia que lo llevó a enterrar a los soldados argentinos. "No fui yo, es el ser humano en mí que hizo esto posible", dijo. Por su parte, Julio Aro, ex combatiente argentino, consideró que fue una actitud humanitaria. "Es ponerse en el lugar del otro. Lo que hicimos fue con amor, con vocación de servicio", añadió.

El Plan de Proyecto Humanitario

Se exhumaron 122 restos mortales que yacían en 121 tumbas en el cementerio de Darwin, de los cuales 104 soldados argentinos fueron identificados.

Los objetivos de iniciativas como el Plan Proyecto Humanitario están contemplados en los Convenios de Ginebra y son el aspecto central del cometido del CICR de prevenir las desapariciones en conflictos armados.

En el cementerio de Darwin, se procedió a la localización de las tumbas y a identificar los restos de los soldados allí sepultados para cumplir con el objetivo humanitario de dar respuestas a las familias.