Perú: expertos forenses debatieron sobre relación de la medicina legal y los derechos humanos

Más de 25 expertos forenses, entre directores y representantes de los Institutos de Medicina Legal de dieciséis países de Iberoamérica, participaron en el X Encuentro de la Red Iberoamericana de Instituciones de Medicina Legal y Ciencias Forenses realizado en Lima el 9 y 10 de octubre.

Desde hace 10 años, el CICR promueve el encuentro de las distintas instituciones forenses de Iberoamérica a través de esta red que las representa. El X Encuentro propició un intercambio de información sobre programas, metodologías y sistemas de capacitación en el ámbito forense, pero además permitió la coordinación y la planificación de actividades conjuntas en el ámbito pericial, formativo, de investigación y divulgación científica.

"Para el CICR es importante que los servicios médico-legistas de la región estén a la vanguardia y potencialicen sus conocimientos, pero a la vez es relevante que integren aspectos humanitarios a la labor científica que realizan, considerando que las familias de los deudos están atentos a las informaciones que les proporcionan y requieren además de un acompañamiento especial debido a los momentos de vulnerabilidad que enfrentan", sostuvo Silvana Mutti, jefa de la Delegación Regional del CICR para Perú, Bolivia y Ecuador, durante la clausura del evento.

Participaron representantes de Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Portugal, Uruguay y Venezuela así como de la Asociación Latinoamericana de Antropología Forense -(ALAF) y del CICR, quienes discutieron acerca del manejo de bases de datos genéticos en la identificación forense; el uso de la genética forense en la identificación de restos óseos de personas desaparecidas, los aportes de la medicina legal a la investigación de crímenes de terrorismo de Estado; la violencia hacia las mujeres adultas, adolescentes y niñas entre otros.

La Red, fundada en el 2007, trabaja en la región de forma independiente, ofreciendo asesoría técnica a los Estados para que estos establezcan estructuras que cumplan con los estándares internacionales comunes a los procesos de identificación, asegurar los derechos de las familias y las víctimas, así como la gestión adecuada de los cuerpos y la búsqueda de las personas desaparecidas.