Ucrania: el CICR insta a encontrar una solución urgente para salvar vidas e impedir que suceda lo peor en Mariupol

Ginebra (CICR) – A centenares de miles de personas civiles atrapadas por los intensos combates en Mariupol les espera lo peor, a menos que las partes alcancen un acuerdo humanitario concreto, advirtió hoy el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

"Instamos a todas las partes en los enfrentamientos a poner en primer lugar los imperativos humanitarios. La población de Mariupol ha soportado semanas de una pesadilla donde se juegan la vida y la muerte. Esto tiene que terminar ya. Se debe garantizar su seguridad y acceso a los alimentos, el agua y el alojamiento", dijo el presidente del CICR, Peter Maurer.

Centenares de miles de residentes de la ciudad ahora se encuentran frente a una escasez extrema o total de bienes básicos, como alimentos, agua y medicamentos. Personas de todas las edades, incluidos miembros de nuestro personal, se están alojando en sótanos sin calefacción y arriesgan la vida para salir a buscar rápidamente alimentos y agua. Hay cadáveres de civiles y de combatientes atrapados entre los escombros o incluso en plena calle, donde cayeron. Es imposible atender tanto las lesiones crónicas como las afecciones debilitantes. El sufrimiento humano es, simplemente, inmenso.

 "El sonido de la guerra es permanente. La artillería alcanza los edificios y se esparcen fragmentos de metralla por todos lados. Esta es la situación que viven todos los habitantes de la ciudad", dijo el responsable operacional del CICR en Mariupol, Sasha Volkov.

Para aliviar estas miserias y evitar una tragedia mayor, se necesita alcanzar sin demora un acuerdo concreto, preciso y viable, para que quienes lo deseen puedan irse a un lugar seguro y para que la ayuda vital llegue a quienes no pueden irse o desean quedarse.

Todos los que participan en las hostilidades deben acordar las modalidades y los plazos de un cese de las hostilidades y la ubicación precisa de las rutas para el paso seguro, y luego garantizar el respeto del acuerdo. Se debe dar aviso con antelación suficiente para que la información se comunique efectivamente a través de la cadena de mando militar, así como a la población civil, sobre todo teniendo en cuenta que las redes de comunicación y energía son inestables o no funcionan. Es importante destacar que las partes también deberían limpiar los caminos y remover todo obstáculo que impida el paso seguro. El CICR está dispuesto a actuar como intermediario neutral para facilitar el diálogo sobre estas cuestiones humanitarias.

El CICR insta a las partes en conflicto a respetar el derecho internacional humanitario. Las personas civiles que no participan en las hostilidades, la infraestructura civil, los hospitales y el personal médico no pueden ser objeto de ataques. Las partes deben hacer todo lo que esté a su alcance para evitar ubicar objetivos militares en zonas densamente pobladas o en sus cercanías y para proteger a las personas civiles contra los efectos de los ataques. Se debe permitir que las personas civiles salgan del lugar de los enfrentamientos, así se haya acordado una ruta de paso seguro o no.

El tiempo se acaba para los centenares de miles personas atrapadas en los enfrentamientos. La historia mirará con horror lo que ahora está sucediendo en Mariupol si las partes no alcanzan un acuerdo lo más pronto posible.

Nota para los editores y productores
1. Establecido en 1863, el CICR realiza actividades en todo el mundo para ayudar a las personas afectadas por conflictos armados y por otras situaciones de violencia y para promover las normas que protegen a las víctimas de la guerra. Es una organización neutral, independiente e imparcial cuyo cometido le fue asignado por los Convenios de Ginebra de 1949. Tiene su sede en Ginebra, Suiza, y trabaja en más de cien países.
2. El CICR trabaja en Ucrania desde 2014, con un equipo de más de 600 empleados y empleadas. En estrecha colaboración con la Cruz Roja de Ucrania y con nuestros socios del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, estamos incrementando nuestra respuesta a las vastas y crecientes necesidades de ayuda humanitaria en Ucrania