Ginebra/Saná (CICR) – Un edificio que se utilizaba como lugar de detención en Yemen fue destruido en un ataque aéreo, lo que causó la muerte o heridas a los detenidos que estaban alojados allí cuando el edificio, de varios pisos, se derrumbó.
En el lugar, se alojaban unos 170 detenidos. Cuarenta de ellos estaban recibiendo atención médica; se presume que los demás detenidos han muerto, pero el número de víctimas no ha sido confirmado.
Voluntarios de la Media Luna Roja de Yemen ayudaron a extraer los cadáveres de los escombros, mientras se esperaba la llegada de maquinaria pesada para asistir en la tarea. La localización de todos los cuerpos llevará varios días.
CC BY-NC-ND / CICR / Indy Nassif
Un equipo del Comité Internacional de la Cruz Roja viajó hasta Dhamar, donde tuvo lugar el ataque. El equipo, que cuenta con un especialista forense entre sus miembros, entregó 200 bolsas para cadáveres e insumos médicos para tratar hasta 100 heridos de gravedad.
"Fue muy impactante ver los daños que produjo el ataque, ver los cadáveres entre todos los escombros. Naturalmente, sentimos indignación y tristeza. Las personas que no participan directamente en los enfrentamientos no deberían morir de esta forma", dijo el jefe de la delegación del CICR en Yemen, Franz Rauchenstein, después de visitar el sitio.
El ataque del domingo nos recuerda con toda crudeza lo que establecen las leyes de la guerra: solo quienes participan en las hostilidades y los objetivos militares pueden ser objeto de los ataques. Se deben tomar todas las precauciones posibles para preservar a la población civil y a todas las personas que no participen en las hostilidades, como las personas detenidas.
"Un aspecto fundamental de la labor que realiza el CICR es el diálogo con las partes acerca de la forma de conducir las operaciones militares. Recordamos a los Estados y a otras partes las responsabilidades que tienen al respecto. Es muy impresionante ver que esto suceda en un lugar de detención que hemos visitado en el pasado. Estos detenidos no deben ser olvidados", dijo Fabrizio Carboni, jefe de las Actividades Operaciones del CICR en Oriente Medio y Oriente Próximo.
Los detenidos que murieron en el ataque habían sido visitados por el CICR, que trabaja en todo el mundo para garantizar condiciones de detención humanas. Para ello, visita lugares de detención en forma regular, se entrevista con los detenidos para verificar sus condiciones y el trato que se les brinda, y propone mejoras, cuando corresponde. El CICR comunica sus observaciones en forma confidencial a las autoridades competentes.
"El conflicto en Yemen está causando demasiadas víctimas entre la población civil y otras personas que no participan en las hostilidades. Ahora tenemos que entender qué es lo que pasó exactamente y cómo podemos apoyar a los heridos y a los familiares de los fallecidos", dijo Carboni.
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