Pese a un reciente alto el fuego de cinco días negociado por las partes en medio de la operación Tormenta Decisiva, las hostilidades no han disminuido en Yemen. Los civiles continúan pagando el precio de la violencia. La situación humanitaria ha empeorado en las gobernaciones de Sadá, Saná, Taiz y Adén. Los incesantes enfrentamientos provocan la afluencia de heridos a los hospitales locales y el desplazamiento de los civiles, que afrontan una situación cada vez más insegura y una economía en rápida desintegración.
"Entre los constantes enfrentamientos, todos los días los civiles afrontan presiones cada vez mayores debido a la violencia, la falta de electricidad y la escasez de combustible", dijo Antoine Grand, jefe de la delegación del CICR en Yemen. "Sin embargo, los ceses temporales de hostilidades negociados por el CICR han permitido a los equipos mixtos del CICR y la Media Luna Roja de Yemen (MLRY) prestar ayuda de emergencia a las personas atrapadas en los campos de batalla y sus alrededores".
A continuación de las intervenciones del CICR ante las partes, los voluntarios de la MLRY recogen cadáveres y los devuelven a sus familiares para que procedan a su debido entierro. Las situaciones de alto el fuego también permiten a los civiles acceder a la asistencia de salud, lo cual en otras circunstancias no resulta posible.
"La proximidad a las víctimas y el contacto personal con todas las partes acerca de las cuestiones humanitarias esenciales ha sido y seguirá siendo nuestra prioridad", señaló el señor Grand.
La estricta adhesión a nuestros principios de independencia, neutralidad e imparcialidad es un factor clave para asegurar nuestro acceso a todas las víctimas de este conflicto del otro lado de las líneas de frente".
El CICR mantiene un diálogo activo con todas las partes en el conflicto situadas dentro y fuera de Yemen, a fin de recordarles las obligaciones que les impone el derecho internacional humanitario, en particular, la de proteger a los civiles y la infraestructura civil, con inclusión del personal médico y las instalaciones de salud. La urgente necesidad de un acceso más amplio, seguro y sin trabas para los equipos del CICR y la MLRY que trabajan en zonas directamente afectadas por el conflicto también es un tema que se aborda en forma cotidiana con todas las partes.
Pese a la intensidad del conflicto y al deterioro del entorno de seguridad durante los últimos dos meses, el CICR y la MLRY han proporcionado alimentos, agua potable, asistencia de salud y otros servicios humanitarios esenciales a más de 720.000 personas en todo Yemen.
ACCIÓN DEL CICR EN YEMEN: HECHOS Y CIFRAS MÁS RECIENTES > (en inglés)
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