Las represas, ubicadas cerca de las líneas del frente en las regiones de Donetsk y Járkov, han sufrido, por su ubicación, graves daños a causa del conflicto armado internacional entre Rusia y Ucrania.
“Cuando uno abre el grifo, espera que salga agua, sobre todo en medio de un conflicto armado activo”, señaló Jurg Eglin, jefe de delegación del CICR en Ucrania.
“Gracias a estas reparaciones, podremos lograr que suceda. Además, las obras reducen el riesgo de que se derrumbe la represa, que provocaría muertes y enormes daños a la infraestructura y los medios de subsistencia”.
Las represas de Oskil y Raihorodok, ubicadas en las regiones de Járkov y Donetsk respectivamente, forman parte de un sistema de abastecimiento de agua que desemboca en el canal Siverskyi Donetsk-Donbas, en el este de Ucrania. En un momento, este sistema satisfacía las necesidades industriales y de agua potable de millones de personas de la región.
Debido a las hostilidades incesantes y los cambios en las líneas del frente desde la intensificación del conflicto armado en febrero de 2022, la capacidad del canal se vio drásticamente reducida, con lo cual abasteció principalmente a la población de Kramatork, en la región de Donetsk.
El conflicto armado no solo ha afectado el abastecimiento de agua a las comunidades, sino que también ha exacerbado algunos defectos técnicos que impiden el desembalse seguro del exceso de agua. Estas consecuencias del conflicto armado, sumadas a la fragilidad de las represas, aumentan el riesgo de derrumbe e inundación.
Junto con las autoridades locales en materia de agua, el CICR reparó mecanismos importantes para el funcionamiento de las compuertas de la represa y eliminó escombros producto de los daños. También prestamos apoyo a nuestros socios en la limpieza de municiones sin estallar que suponían un peligro en los alrededores de las represas para así disminuir los riesgos a los que están expuestos los trabajadores del servicio.
En 2023, el CICR ayudó a mejorar el acceso a servicios esenciales –agua, electricidad y calefacción– para más de 4,8 millones de personas en toda Ucrania.
Notas para los editores:
Las represas de Oskil y Raihorodok, ubicadas en las regiones de Járkov y Donetsk, respectivamente, se construyeron en la década de 1950 con el objetivo principal de suministrar agua al canal Siverskyi Donets Donbas. Este canal abastece a toda la región de Donetsk, a fin de satisfacer tanto la demanda industrial como de la población de la zona. Las represas cumplen distintas funciones: mientras que Raihorodok fue construida para mantener constante el caudal del río Siverskyi Donets para alimentar el canal, Oskil fue diseñada para mantener un flujo suficiente hacia este río, y contribuye a mantener la reserva de agua en el embalse de Oskil durante las estaciones secas. Por otra parte, este embalse se volvió fuente de agua para la agricultura, y su represa proveyó electricidad desde la central hidroeléctrica.
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Patrick Griffiths, CICR Kiev, tel.: +380 (66) 657 02 89, pgriffiths@icrc.org
