Líbano: curar las heridas causadas por el conflicto, por dentro y por fuera
En el Centro de Formación en Traumatología de Heridas por Armas de Fuego (CFTA) de Trípoli, en Líbano, a los pacientes no solo se les colocan prótesis. También se les brinda apoyo psicosocial para ayudarlos a afrontar el trauma que han experimentado como consecuencia del conflicto que persiste en Siria.
Las personas que reciben tratamiento en el CFTA, en su mayoría sirios, palestinos y libaneses, han visto cómo el brutal conflicto en Siria cambiaba sus vidas para siempre. Han perdido miembros por armas explosivas, pero también padecen profundas lesiones mentales y traumas.
Sesiones de rehabilitación para contribuir al proceso de curación
"En el marco de las sesiones de rehabilitación psicológica, explicamos a los pacientes que sentirse como se sienten y pensar como piensan es absolutamente normal tras pasar por lo que han pasado", señala Nercesse Armani, psicólogo del CFTA. "La salud mental ha sido un desafío importante para nosotros, por las actitudes culturales. Por eso estructuramos las sesiones de forma dinámica y participativa."
Los psicólogos del CFTA organizan sesiones de terapia de grupo con los pacientes y también consultas individuales de psicoterapia.
El apoyo psicosocial brinda consuelo y alivio
"Cuando una persona pierde uno de sus miembros, piensa que todo su cuerpo ha sido destruido y que va a estar deprimida durante muchísimo tiempo", señala Nercesse Armani, psicólogo del CICR del CFTA de Trípoli, en Líbano.
"La verdad es que se recuperan mucho más rápido de lo que uno habría esperado. Lo que realmente necesitan es tiempo para acostumbrarse a su nueva situación. En algún momento, todos lo superan y siguen con sus vidas productivas".
"Quiero que las sesiones sean más largas. Nunca quiero que se terminen", afirma Maram, mientras reorganiza las flores de su habitación. "Cuando estamos juntos, y me refiero a los pacientes y al personal, es como estar en casa, no en un hospital. Siento que somos una familia, formada al azar pero aun así una familia. ¿A quién no le gustaría pasar tiempo con su familia?"
"Llego a estas sesiones grupales decaída y me voy con un estado de ánimo totalmente positivo. Las sesiones me sacan de las dificultades que hay en mi vida, aunque solo sea durante una hora o algo así."
"Las sesiones de rehabilitación me ayudaron a darme cuenta de lo importante que es la comunicación para mi salud en general, no solo para mi bienestar físico. Hablar del tema y participar en debates interactivos me han convencido de que otras personas tienen los mismos sentimientos", señaló Hussein, a quien se le colocó una prótesis.
"Ahora, a veces comparto mis sentimientos y lo que he experimentado en mi vida. Creo que los demás entienden de dónde vengo. Esto me hace pensar que lo que digo y lo que pienso son importantes, que otras personas me escuchan."
A pesar de haber perdido una pierna, de verse obligada a abandonar su hogar por los enfrentamientos y de estar lejos de sus hijos y nietos, Hamda no ha perdido su sentido del humor y su necesidad de reírse. Todavía encuentra motivos para hacer bromas y soltar carcajadas.
"Hace un par de meses, lloraba hasta quedarme dormida casi todas las noches. Pero ahora siento que vuelvo a ser yo misma", indica Hamda. "Física y mentalmente, todavía tengo dolor, pero ya no me guardo ese dolor para mí sola. La mitad de mi dolor se evapora cuando alguien que se sienta a mi lado y me dice: Te escucho."
Cualquier persona con heridas de arma explosiva, sean cuales sean su nacionalidad y experiencias, puede acceder a los servicios del Centro de Formación en Traumatología de Heridas por Armas de Fuego (CFTA) de Trípoli, todos ellos gratuitos.