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México y América Central: encuentro virtual entre autoridades militares y policiales de América Latina para analizar los retos ante la COVID-19

Ciudad de México- El mundo enfrenta nuevos desafíos ante la COVID-19 y, en momentos como el actual, las fuerzas armadas y de seguridad han tenido que realizar funciones y misiones adicionales a las tradicionales, incluyendo, en muchos casos, la vigilancia del cumplimiento de las medidas sanitarias, distribución de insumos, custodia de lugares de confinamiento, apoyo sanitario, gestión de cadáveres, entre otras.

Para reflexionar sobre los retos y oportunidades que tienen estas instituciones para hacer frente a la pandemia, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) facilitó un encuentro virtual entre representantes de las fuerzas armadas y de seguridad de más de 20 países.

"Los miembros de las Fuerzas Armadas y seguridad están en la primera línea de los esfuerzos de los Estados para frenar la propagación del virus y proteger a su población. Esto conlleva una gran responsabilidad", expresó Anton Camen, Jefe Adjunto de Delegación Regional del CICR para México y América Central al dar la bienvenida al Webinar Internacional "Las Fuerzas Armadas y de Seguridad ante el COVID-19. Desafíos y Oportunidades".

A los encargados de velar por la seguridad de un Estado se les han confiado tareas que son críticas en estos días, como la protección a los servicios de salud y hacer cumplir las estrategias de contención sanitaria determinadas por cada nación, "medidas que son necesarias, pero, a veces, impopulares, no siempre comprendidas y acatadas". En este contexto destacó la violencia registrada en contra de trabajadores y trabajadoras de salud.

En el encuentro virtual, que tuvo lugar el pasado 20 de mayo, participaron el General Inspector Hernán Patricio Carrillo Rosero, comandante General de la Policía Nacional del Ecuador; el General de Brigada Carlos Alberto Tejada Murcia, jefe de Estado Mayor de la Fuerza Armada de El Salvador; el Comisario GN Francisco Justo Toscano Camacho, titular de la Unidad para la Protección de Derechos Humanos, Disciplina y Desarrollo Profesional de la Guardia Nacional de México; el Coronel Alejandro Castro, jefe de Derechos Humanos de la Policía Nacional de Colombia; el General (retirado) Ismael A. Cifuentes Bustamante, experto militar y Erich Meier Junior, Asesor del Programa Policial del CICR.

Autoridades de Fuerzas Armadas de varios países de América Latina participando en webinar sobre los retos y oportunidades que han surgido a raíz de la COVID-19. CICR/Brigadier (R) I. A. Cifuentes. 

El evento, en el que participaron más de 260 personas de al menos 33 instituciones de seguridad, permitió el intercambio de experiencias, así como la difusión de buenas prácticas y el análisis de los desafíos que enfrentan en estos tiempos complejos.

"La COVID-19 no ocurre en un vacío legal. Las fuerzas armadas y las fuerzas de seguridad son parte de las respuestas de los gobiernos para prevenir, contener y gestionar la pandemia, sin olvidar su función de protección de la población y la comunidad", expuso Erich Meier, especialista en temas policiales del CICR en Ginebra, Suiza.

Esta contingencia es un problema de salud pública que tiene un alcance social, efectos económicos y consecuencias en la seguridad pública y nacional, "pero no debe interpretarse como un tema de índole criminal o un conflicto", recalcó.

Con relación al uso de la fuerza en el contexto de la pandemia, Meier recordó la importancia del cumplimiento de los estándares internacionales: la legalidad de la acción policial y militar en el uso de la fuerza, la necesidad y la proporcionalidad. La fuerza debe aplicarse como último recurso porque antes deben privilegiarse opciones como la verbalización, negociación y mediación.

El Comisario Toscano compartió que el personal de la Guardia Nacional de México es consciente de que son un punto medio entre los trabajadores sociales, el personal médico y las familias de los pacientes. "A los familiares siempre se les debe considerar como personas afectadas por el dolor y nunca considerarlos como unos agresores o personas que pretenden hacer daño".

"Como instituciones al frente de la primera línea, debemos también preocuparnos por la salud de nuestro personal y su bienestar", expuso el General de Brigada Tejada, e hizo hincapié en que las fuerzas armadas deben de velar en todo momento por el irrestricto respeto a los derechos humanos y actuar en apego a la ley. "Las fuerzas públicas y de seguridad son el baluarte y la vanguardia para poder contener estas pandemias, estas calamidades a nivel mundial y nacional".

El General Cifuentes indicó que "como fuerzas de seguridad debemos guardar un balance entre proteger a la población ante la pandemia y garantizarle el ejercicio de sus derechos fundamentales".

Juan Carlos Gómez, Delegado del CICR ante las Fuerzas Armadas y de Seguridad, quien moderó el encuentro, resaltó la importancia de la flexibilidad y de la actuación guiada por el sentido común por parte de esas instituciones ante una comunidad que está ansiosa y atemorizada. "Esta situación requiere de un manejo muy especial por parte de la fuerza pública y de las fuerzas armadas".

El coronel Castro expresó que estas instituciones están llamadas a garantizar el ordenamiento social. "Hoy en día tenemos una carga adicional en la cual debemos motivar y promover la innovación, exigir un fundamento previo frente al actuar, prevaleciendo siempre a la población en situación de vulnerabilidad y pensar en prospectiva frente a qué va a ocurrir".

El comandante de la Policía Nacional del Ecuador destacó la necesidad de la planificación antes, durante y después de cada escenario, para evitar la emergencia y lograr que las instituciones policiales y armadas contribuyan a salvar vidas. Para ello, es fundamental el cuidado del personal, que se mantengan en buena condición física y mental, para que puedan contribuir a la mitigación de los efectos de la pandemia.

"Superaremos la pandemia, pero también hay que trasladarnos de un escenario dramático a uno de oportunidades y desafíos", finalizó el General Inspector Carrillo, quien invitó a mirar las misiones futuras que tendrán las autoridades ante nuevas formas de convivencia vigentes hasta la contención global de la pandemia.

La misión del CICR es proteger la dignidad de las víctimas o personas afectadas de los conflictos armados y otras situaciones de violencia. Como organización internacional humanitaria se rige por los principios de independencia, neutralidad e imparcialidad. El diálogo que sostiene con policías y fuerzas armadas busca aumentar el conocimiento, la comprensión y la aceptación de su cometido y su labor, así como de la normativa internacional aplicable.