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Nepal: recordar a seres queridos desaparecidos

La mayoría de los padres tienden a recordar fechas asociadas con sus hijos: su fecha de nacimiento, la primera vez que hablaron, su primera sonrisa o risa, cuándo dieron sus primeros pasos, su primer día de escuela, su fecha de graduación, el día de su boda. Para una madre afligida, la fecha clave es el 20 de noviembre de 2002, el día que vio a su hijo por última vez.

Padres y madres con hijos e hijas desaparecidos, mujeres que no tienen noticias de sus esposos y un joven que sigue buscando el paradero de su padre: todos ellos se reunieron en el Chautara, un monumento conmemorativo, en Nepal, para compartir el dolor de la pérdida de un ser querido.

En la mañana del domingo 21 de junio, pese a la lluvia del monzón, familiares de desaparecidos, representantes de organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, periodistas locales y el personal del CICR y de la Cruz Roja Nepalesa se reunieron en Kanchanpur, en una ceremonia para honrar a las personas desaparecidas. Los asistentes se reunieron frente al Chautara y encendieron velas en memoria afectuosa de sus familiares desaparecidos.

Dhan Bahadur Chaudhary, un padre cuyo hijo adolescente está desaparecido, fue uno de los asistentes. Tranquilo y poco hablador, Chaudhary señala: "Nuestros hijos llevan mucho tiempo desaparecidos. Construimos este Chautara en su memoria, con nuestros mejores deseos para ellos, estén donde estén".

Otros no tienen tanta calma como él. Laxmi Chaudhary siente que se ha descuidado a las familias de personas desaparecidas. Sin embargo, agradece la labor del programa de apoyo psicosocial Hateymalo, porque le ha dado herramientas para compartir su dolor con personas en situaciones similares y para no sentirse tan sola.

Brindar apoyo psicosocial a familias llenas de dolor

Hateymalo, un programa que el CICR puso en marcha en 2010, tiene el objetivo de ayudar a los familiares de personas desaparecidas a encontrar una manera de manejar su dolor.

"No hay un modelo ni una manera similar de manejar la ambigüedad de la pérdida que sienten los familiares de personas desaparecidas", afirma Yubaraj Adhikari, responsable de los programas de salud mental y apoyo psicosocial del CICR en Nepal. "El proceso de conmemoración ayuda a las familias a seguir adelante en el difícil proceso de duelo. La sociedad nepalesa todavía cree en cierto control espiritual de las vidas de las personas, y el proceso de conmemoración es una manera cultural de ayudar a mitigar el impacto de la incertidumbre que provocan las desapariciones de sus seres queridos".

La decisión sobre qué construir para conmemorar a sus seres queridos corresponde a los familiares de personas desaparecidas. Geeta Khatri, jefa de equipo del programa Hateymalo en Kailali y Kanchanpur, explica: "Nosotros no interferimos en esa decisión. Las familias se reúnen en grupo, evalúan todas las opciones y, juntas, llegan a un acuerdo. Lo único que hacemos nosotros es dar nuestra opinión cuando nos preguntan y ayudarlas una vez que han tomado su decisión".

El Chautara, uno de los monumentos conmemorativos que se construyeron en el marco del programa Hateymalo, se encuentra en la carretera a la altura de Bani, Krishnapur, en el distrito de Kanchanpur, en el extremo oeste de Nepal. Es un lugar de recuerdo para muchas familias. Quienes dediquen unos momentos a leer el mensaje grabado sabrán que el monumento se creó en memoria de personas que siguen desaparecidas desde la época del conflicto armado de una década (1996-2006) en Nepal.

En colaboración con la Cruz Roja Nepalesa y con diversas ONG locales, Hateymalo brinda apoyo psicosocial, económico, jurídico y sociocultural a los familiares de personas desaparecidas. Hasta ahora, Hateymalo ha ayudado a más de 1.300 familias en 43 distritos de todo Nepal.