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Sudán del Sur/Sudán: reencuentro familiar cruzando las fronteras

Amin*, un niño sudanés de trece años de edad, estuvo más de tres años separado de sus familiares. Dejó el estado de Nilo Blanco, Sudán, donde la familia vivía antes de empezar a separarse, junto con sus dos hermanos mayores y se fue al estado de Kordofán del Sur, para reencontrarse con su padre. Poco después de su llegada, estalló el conflicto, y el padre y sus tres hijos huyeron a Sudán del Sur. Allí, el padre y uno de los hijos emprendieron otro viaje y dejaron a Amin con su hermano. Amin pronto se fue por su cuenta y no volvió a ver a ninguno de sus familiares hasta que llegó a Yuba, capital de Sudán del Sur.

Las delegaciones del CICR en Sudán del Sur y Sudán, junto con la organización sudanesa del sur Confident Children out of Conflict y el Consejo Nacional de Bienestar Infantil de Sudán, trabajaron sin descanso para reunir a Amin con su madre y el resto de sus familiares en Sudán el 28 de abril de 2015.

Localizar a personas que se han separado de sus seres queridos en épocas de conflicto y restablecer el contacto entre ellas y sus familiares es un servicio humanitario vital que brinda el CICR. Requiere encontrar a las personas respectivas, reunir familias y tratar de averiguar el paradero de las personas desaparecidas.

Como parte de una red más amplia de servicios de búsqueda que ofrecen las delegaciones del CICR y las Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y la Media Luna Roja en la región, el CICR puede ayudar a las familias que han quedado separadas en distintos países.

Amin* abandona Yuba para viajar a Jartum, Sudán, donde va a reencontrarse con su madre.

Amin posa para una foto de despedida con el personal de Confident Children out of Conflict, con quienes ha vivido en Yuba durante el último año.

Mientras tanto, Medina*, la madre de Amin, y su hijo menor, Mazin*, llegan a la oficina del CICR en Jartum, Sudán, una hora antes del aterrizaje previsto del vuelo de Amin. "Mazin no lo conoce. Era un bebé cuando Amin se fue", señala Medina.

Medina: "No esperaba ver a Amin. No sabía si podría, porque Sudán del Sur está lejos y no conocemos a nadie allí".

Medina: "Recé a Alá para que me diera paciencia, para que me hiciera paciente".

Medina: "Cuando me enteré de que Amin iba a volver a casa, estaba tan feliz que esa noche no pude dormir. Ayer tampoco pude dormir. Me levanté al amanecer y preparé nuestras cosas para el viaje [desde Kosti, en el estado de Nilo Blanco, hasta Jartum]. Esperé que saliera el sol para que pudiéramos emprender el viaje".

Medina: "Recuerdo a menudo la época en que íbamos juntos al mercado. Amin me decía: 'Umi [madre], cuando sea mayor te voy a construir una casa grande, te voy a comprar un coche y voy a llevarte donde quieras. No vas a tener problemas'".

Amin: "Ahora estoy feliz porque estoy con mi madre. Nunca voy a estar sin madre ni padre".

Mensaje de Medina a las madres que esperan que sus hijos regresen a casa: "Les diría: 'Vengan conmigo, hay un lugar donde me gustaría llevarlas: el CICR'".

Amin con sus familiares y amigos, con representantes del Consejo Nacional de Bienestar Infantil de Sudán y con los equipos del CICR de Sudán y Sudán del Sur.

Medina: "Espero que mis otros dos hijos y mi marido vuelvan pronto a casa".

 

*Se han cambiado los nombres para proteger su privacidad.

Todas las fotos: CC BY-NC-ND/CICR/Asia Kambal, Anna Schaaf y Katharine Marshall