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Refugiados, retornados y desplazados: ICRC statement to the United Nations, 2017

Debate general sobre el Informe del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados, cuestiones relativas a los refugiados, los retornados, los desplazados y asuntos humanitarios. Asamblea General de las Naciones Unidas, Tercera Comisión, tema 64 del orden del día. Declaración del CICR.

En 1998, recibimos con agrado la publicación de los Principios rectores de los desplazamientos internos. Hoy, casi veinte años después, ha habido avances notables. Los Principios rectores han adquirido una autoridad considerable, y muchos Estados los han incorporado en sus leyes y políticas internas. La Convención de Kampala, el primer instrumento regional jurídicamente vinculante en el mundo en materia de protección y asistencia de las personas desplazadas internamente, entró en vigor en 2012. Un estudio realizado por el CICR el año pasado reveló que varios Estados ya han adoptado, o están adoptando, medidas importantes para incorporar la Convención en su derecho interno y hacer efectivas sus disposiciones.

Asimismo, la Conferencia de los Estados Partes, encargada de fortalecer la aplicación de la Convención, celebró su primera reunión recientemente.
Así y todo, año tras año, millones de personas son desplazadas a raíz de los conflictos armados y de otras situaciones de violencia, la mayoría dentro de su propio país. Es preciso hacer mucho más para evitar estos desplazamientos. Y, cuando ocurren efectivamente, es preciso redoblar los esfuerzos para que tanto las poblaciones desplazadas como quienes las acogen reciban el apoyo necesario. Las personas desplazadas necesitan protección, asistencia y soluciones duraderas, adaptadas según sus necesidades particulares. Esta debe ser una prioridad colectiva. Solo podrá obtener respuesta mediante un esfuerzo conjunto entre las autoridades nacionales y locales, los actores humanitarios y del ámbito del desarrollo, así como las propias personas desplazadas y las comunidades de acogida.

En un mundo donde la urbanización avanza a gran velocidad, también hemos de aprender a responder mejor a los desplazamientos en las ciudades. Las personas desplazadas internamente deben ser el núcleo de este debate. Celebramos el énfasis que ha puesto la relatora especial Jiménez-Damary en aumentar la participación de estas personas en las decisiones que los afectan.

El vigésimo aniversario de los Principios rectores, próximo a conmemorarse, es una oportunidad de volver a poner el foco en las personas desplazadas internamente. En honor a esta fecha, los Estados deberían adoptar medidas con prontitud para prevenir los desplazamientos y proteger a las personas desplazadas, particularmente, respetando el derecho internacional de los derechos humanos y, en situaciones de conflicto armado, el derecho internacional humanitario. Tomando como ejemplo las prácticas idóneas en la materia, deberían aplicar medidas concretas para dar respuesta a las necesidades de las personas desplazadas internamente y hacer respetar sus derechos humanos.