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Cómo se aplica el derecho humanitario en los conflictos y en las centrales nucleares

Cuando los sitios peligrosos, como las centrales nucleares, se convierten en zonas de batalla, las consecuencias para la población civil y para las generaciones futuras son inconmensurables. Debido a la potencial amenaza que representan si son objeto de ataques o sufren daños, las centrales nucleares y otras instalaciones que contienen fuerzas peligrosas gozan de protección específica según el derecho internacional humanitario. Obtenga más información.

¿Preocupa al CICR que se conduzcan hostilidades en los alrededores de la central nuclear de Zaporiyia, en Ucrania?

Sí. En las centrales nucleares como la de Zaporiyia, se almacena material radioactivo que podría ser liberado al ambiente si varios componentes de la estación fueran destruidos, dañados o si se alterara su funcionamiento.

Un accidente en un reactor nuclear podría provocar exposición a la radiación (radiación gamma) y contaminación radioactiva (inhalación de materiales radiactivos en el aire), que a su vez pueden tener efectos graves a corto y a largo plazo para la salud de los humanos y para el ambiente, imposibles de controlar en el tiempo y en el espacio. Además del envenenamiento por radiación y las enfermedades que podría acarrear, se ha comprobado que las mutaciones genéticas provocadas por la exposición a la radiación ionizante trascienden generaciones. El material radiactivo puede esparcirse en grandes áreas y producir efectos devastadores en los ecosistemas, la agricultura y la seguridad alimentaria, lo cual expone a grandes partes de la a los riesgos a corto y a largo plazo de contraer enfermedades y de morir. El proceso de descontaminación es largo y, en algunos casos, imposible.

El riesgo de una fuga de radiación —que puede resultar de las actividades militares en los alrededores de este tipo de instalaciones— es muy alto, tomando en cuenta la posibilidad de que se produzcan daños directos o incidentales a un reactor u otros componentes críticos que permiten el funcionamiento seguro de la central, así como que ocurran errores humanos por parte del personal que trabaja en situaciones cada vez más extenuantes de presión y estrés.

REUTERS/Alexander Ermochenko

¿Cuentan las centrales nucleares con protección durante un conflicto armado?

Sí. Las centrales nucleares son bienes de carácter civil. Como tales, están protegidas contra ataques y represalias, por lo cual no deben ser objeto de ataques. En caso de dudas, se debe suponer que esos bienes son civiles.

Las partes también deben tener el cuidado permanente de preservar a la población civil y a los bienes de carácter civil durante todas las operaciones militares. Dado el riesgo de liberación de radiación y las consecuencias graves para los civiles, las partes deben ser extremadamente cuidadosas al realizar movimientos y maniobras de tropas u otras actividades militares en zonas cercanas a centrales nucleares.

¿Pueden las centrales nucleares ser atacadas por el solo hecho de que una de las partes las utilice con fines militares?

No. Las obras e instalaciones que contienen fuerzas peligrosas, como las centrales nucleares, gozan de protección específica según el derecho internacional humanitario. No pueden ser atacadas solo porque se hubieran convertido en objetivos militares si tales ataques podrían provocar la liberación de fuerzas peligrosas y pérdidas graves para la población civil. En tales circunstancias, un ataque contra una central nuclear podría constituir un crimen de guerra.

¿Qué sucede con los objetivos militares ubicados en los alrededores de las centrales nucleares?

Las partes deben procurar no colocar objetivos militares, tales como tropas, armamento o vehículos militares, dentro de las centrales nucleares o cerca de estas. Sin embargo, un objetivo militar, como un puente, utilizado con fines militares podría estar ubicado en los alrededores de dichas instalaciones. Durante un conflicto armado internacional, las mismas prohibiciones contra ataques y represalias en las centrales nucleares se aplican a los objetivos militares, ya sea que estén incorporados en la central nuclear o que se ubiquen en los alrededores de esta, para evitar la liberación de radiación que los daños incidentales perpetrados en las instalaciones podrían causar.

¿Existen circunstancias en las cuales las centrales nucleares o los objetivos militares que se ubiquen en los alrededores de estas podrían ser atacados?

Solamente en circunstancias excepcionales y definidas de manera estricta durante un conflicto armado internacional, las centrales nucleares o los objetivos militares ubicados en sus alrededores podrían perder la protección específica explicada anteriormente. Aun en dichas circunstancias, esto no significa que un ataque contra estos bienes podría considerarse lícito.

Aunque estos objetos llegaran a perder su protección específica, todas las demás normas que protegen a la población civil y al medio ambiente natural son aplicables durante los ataques. Por ejemplo, las partes deben considerar con particular cuidado los riesgos graves para las personas civiles que sean inherentes a cualquier ataque contra tales bienes, al aplicar las normas de proporcionalidad y precauciones en el ataque. Ambas partes deben tomar todas las medidas de precaución prácticas para evitar la liberación de radiación.

¿Tiene permitido una parte que controla una estación de generación de energía nuclear defenderla de un ataque?

Las partes deben procurar no colocar objetivos militares en las proximidades de centrales nucleares. Sin embargo, están permitidas las instalaciones, las tropas y las armas militares cuyo único propósito sea defender la central de un ataque, siempre y cuando solo se utilicen para emprender acciones necesarias para responder a los ataques contra la instalación protegida y el armamento sea limitado de forma acorde.

¿Existen otras medidas que las partes en conflicto puedan tomar para proteger las centrales nucleares?

El derecho internacional humanitario insta a las partes en conflicto a que suscriban acuerdos para conferir protección complementaria a los objetos que contengan fuerzas peligrosas, tales como las centrales nucleares. Por ejemplo, podría tratarse de un acuerdo para establecer una zona desmilitarizada, una medida que también se contempla en el derecho internacional humanitario en tiempo de paz o tras el estallido de las hostilidades.

También se podría ampliar los acuerdos de este tipo para abarcar otras instalaciones que contienen fuerzas peligrosas, como las plantas químicas y las refinerías de petróleo.